En 2015, cuando Kiara Saulters tenía 19 años y trabajaba en una ferretería de las afueras de Chicago, subió una canción irresistiblemente pegadiza de pop luminoso en SoundCloud. Semanas después había firmado su primer contrato y antes de que terminara el año “Gold” ya sonaba en un anuncio de Apple. Era lo más parecido a un cuento de hadas que se pueda imaginar en la industria musical. Pero las cosas no siempre son lo que parecen. La llegada a Los Ángeles desde el Medio Oeste fue más difícil de lo que suponía. Se sentía poco preparada en las entrevistas y superada en sesiones de grabación en las que los productores querían canciones cortadas por el mismo patrón que “Gold”. “Esperan que sepas qué hacer, pero no tienes ni idea”, confiesa a Apple Music. “Creo que le entré mal a mucha gente porque me ponía a la defensiva desde el primer momento”. Los golpes no amainaron. En 2016 se enganchó a los analgésicos tras una operación de amígdalas, una adicción que hoy interpreta como una forma de lidiar con la presión de la fama. El año siguiente trajo el brusco despertar del suicidio de su amigo Chester Bennington, cantante de Linkin Park. Y entonces, después de poner su vida en orden y terminar su primera gira, diagnosticaron con cáncer a su madre. “Casi lo dejo todo, era demasiado”, dice. Aunque llega cinco años después de su debut, lil kiiwi es el primer álbum oficial de Saulters. “Quería presentarme de una vez por todas”, explica, “llevar a la gente a mi mundo y todo lo que me ha pasado en los últimos años”. Las canciones, afiladas reflexiones de una veinteañera, reflejan la diversidad del sonido de Kiiara, desde los himnos de dance ligero hasta susurrados arrullos de synthpop. Aquí, nos habla de sus cinco favoritas. So Sick (feat. blackbear) “Me parece una canción de amor juguetona y un poco mezquina. En plan ‘me tienes enferma, ugh’. Es algo que Bear y yo nos hubiéramos dicho hace unos años, porque salimos una temporada. Cuando la grabé, hacía años que no estábamos en contacto, creo que hasta me había bloqueado, pero sabía que era perfecta para él. Y gracias a la ayuda de nuestros mánagers, aceptó participar. Quedó increíble. Me llamó para pedirme perdón por si había sido demasiado áspero, pero quedó perfecto. No tenemos problemas”. Don’t Get Confused “Ahora mismo no quiero salir con nadie, así que este es un himno para las chicas. Porque los chicos siempre esperan algo, siempre hay intenciones ocultas. Nunca te pedí que me invitaras a una copa, nunca te pedí que me llevaras a cenar, ¿en qué momento se convirtió en una transacción? En esta canción dejo las cosas claras: me pongo lo que me da la gana y lo hago por mí, no por ti. Me encanta la actitud que tiene y lo mucho que dice. Muestra una cara distinta de mí. ¡No te metas conmigo!”. Never Let You “Pasé por muchos momentos difíciles cuando estaba escribiendo el álbum y esta canción los menciona. Me preguntaba por qué había tardado cuatro años en terminarlo, pensaba en dejarlo todo y volver a casa. Me sentía agotada, pero un día fui al estudio y lo solté todo improvisando con productores en los que confiaba de verdad. Fue como una terapia. Aquí me pregunto lo que hubiera sido de mi vida si no hubiera escrito “Gold”, que es algo en lo que pienso muchas veces. ¿Cómo sería si hubiera seguido un camino normal, como mi hermano, que tiene una casa y un perro y una buena relación? La estabilidad me parece muy relajante, pero sé que siempre se quiere lo que no se tiene. Al final, se me ocurrió escribir una canción que pudiera ayudar a la gente que se siente igual”. Accidental “Esta habla de lo peor de mí. En 2016 conocí a un chico que me invitó a cenar. Me preguntó dónde quería ir, quería saber cómo me sentía, entendía mis cambios de humor, era todo amor y paciencia… y yo me porté terrible. Al mirar atrás, creo que yo era joven y me sentía abrumada por todo lo que estaba pasando en mi vida, y a lo mejor tenía un poco de miedo también, porque él me gustaba de verdad y no estaba preparada. Si pudiera volver atrás y actuar de otra manera, lo haría. Le envié la maqueta y sabe que habla de él. Le gustó mucho. No sé, a lo mejor aún nos queda una oportunidad. ¡Me encantaría! Les dije a mis mánagers que iba a usar su nombre como título de la canción y me respondieron que ni de broma”. Bad One “Cuando eres joven, siempre quieres al rebelde. Ya hemos hablado de cómo puedes tener a un buen chico delante y dejarlo pasar. Más adelante, te preguntas en qué estabas pensando. Al ver atrás, tienes claro que los chicos malos fueron un error. Pero es la realidad de cómo me sentía entonces. lil kiiwi habla de un momento muy concreto de mi vida en el que estaba probando cosas, cometiendo errores y trataba de encontrar quién era. Siempre he querido ser una artista, pero nunca quería dejar entrar a la gente. Hasta que por fin lo hice”.