Shirley Horn no duda en encomendar su sublime voz al abrigo de una sección de cuerdas y a la orquesta dirigida por Johnny Mandel. Podría argumentarse que el resultado rebosa un exceso de dulzura. Pero lo cierto es que sacar adelante un repertorio tan adornado como este, demuestra que a Horn, y a su piano, les sobra talento para hacer trascender hasta el más romántico de sus trabajos. La acompañan también en su dulce triunfo los excepcionales talentos de su trío y la asombrosa trompeta invitada de Wynton Marsalis.
- 1965
- 1990
- 1998
- 1987