Encontrar el equilibrio entre el sonido extrovertido del piano y la intimidad de la guitarra es un reto considerable que explica la poca frecuencia con la que escuchamos juntos los dos instrumentos. Sin embargo, el pianista Aleksander Debicz y el guitarrista Łukasz Kuropaczewski son dos espíritus musicales afines que han encontrado una particular geometría sonora. En “Recipe” y “Pedro”, de Debicz, se compenetran con plena consciencia de su diálogo, alternando los pasajes solistas impecablemente. Sus inspirados arreglos les permiten, además, experimentar con emocionantes cruces culturales. El “Concierto de Aranjuez BWV 1056” es un ingenioso encuentro entre Bach y Rodrigo, y “Domingo” sitúa al italiano Scarlatti en el corazón del flamenco español. Más allá, el mágico paseo por la música de Ravel es de escucha obligada y la brillante “Quarantine Song” de Debicz, con la voz sin palabras del contratenor Jakub Józef Orliński, suena plácida y luminosa.