De nuevo en el estudio luego de un paréntesis de tres años, Igor Levit reflexiona sobre la vida y la pérdida en este álbum inspirado por la muerte de un amigo cercano. A lo largo de un viaje que va desde la música de Bach hasta la de Frederic Rzewski (con paradas en Schumann, Wagner, Liszt y otros compositores), Levit expresa sus preocupaciones intelectuales y emocionales con un estilo lleno de fuerza y ternura. El “Ad nos” de la Fantasía y fuga (Fantasia and Fugue) de Liszt suena con ferviente solemnidad y el Liebestod de Wagner es pura pasión. En “Peace Piece” de Bill Evans, el pianista cautiva con el exquisito color que imprime al sencillo pero emotivo mensaje de la partitura.