Aclamado por sus grabaciones de Chopin, el pianista Rafał Blechacz se sumerge aquí en las obras para teclado solo de Johann Sebastian Bach, un auténtico tratado de contrapunto y singularidad melódica que aborda con económica elegancia. La transparencia del “Concierto italiano”, la luminosa claridad de la “Partita No. 1” y la estoica precisión de su “Sarabande” son absolutamente memorables.