AC/DC saludó la llegada de los 90 con uno de los mejores riffs de su carrera: “Thunderstruck”, el tema con el que arranca The Razor's Edge. Grabado en la Columbia Británica, el álbum mantiene un ritmo demoledor e infatigable, gracias en parte al veterano batería Chris Slade, que entró en la banda cuando Simon Wright la abandonó para trabajar con Dio. Por primera vez Brian Johnson no escribió las letras y los hermanos Young aparecen como únicos compositores. Fue una buena jugada. Además de “Thunderstruck”, se sacaron de la manga “Moneytalks”, su mayor acercamiento al pop, y “Are You Ready”, una enérgica llamada a las armas. El sonido afilado y un puñado de canciones explosivas sirvieron para recordar a una nueva generación que el rock and roll sin adulterar estaba más vivo que nunca.