“Soy más creativo cuando me siento incómodo”, decía el australiano Kevin Parker, el nombre que se esconde detrás de Tame Impala, en una entrevista con Apple Music. “La idea de hacer lo que ya sé es aburrida, necesito que haya un poco de peligro”. Ese afán experimental es la única constante de una carrera en la que ha llevado a sus fans del rock psicodélico al dance. • Luego de pasar por algunas bandas de la escena local de Perth, Australia, Parker comenzó Tame Impala en 2007 como un proyecto de grabaciones caseras que terminaron despertando el interés de Modular Recordings. • Su primer álbum, InnerSpeaker, fue uno de los lanzamientos indie más aclamados de 2010. En el siguiente, Lonerism, la psicodelia dio paso a canciones construidas alrededor de sintetizadores y melodías pop entre los sueños (“Be Above It”) y las pesadillas (“Feels Like We Only Go Backwards”). • A mediados de la década de 2010, amplió sus horizontes en participaciones con Mark Ronson y producciones para Lady Gaga. Su influencia llegó tan lejos que Rihanna llegó a grabar un cover de “New Person, Same Old Mistakes”. • Currents, su tercer disco, refleja el interés de Parker por la electrónica, el funk y atmósferas de antro que exploran espacios muy alejados de sus antiguos paisajes. • Luego de cinco años de silencio, en los que solamente apareció en algunas colaboraciones, Tame Impala regresó en 2020 con The Slow Rush, un multifacético material conceptual sobre el paso del tiempo en el que están algunos de los temas más personales de la agrupación.