“La intención fue construir un disco que fuera tanto confesional como íntimo y no me parecía que hubiera un género mejor para eso que el R&B”, explica Cazzu a Apple Music sobre Una Niña Inútil, el EP con el que deja atrás los ecos traperos de Error 93 para perderse en evocadores paisajes sonoros que inauguran una etapa de nueva madurez artística. Más allá de la evolución musical que supone, la inspiración lírica de la poeta modernista argentina Alfonsina Storni (1892-1938) fue esencial a la hora de dar forma a unas letras que exploran emociones desbordantes, momentos de arrebato que contradicen nuestros instintos racionales. “Casi en el momento de finalizar toda la escritura, cuando tenía canciones ya terminadas, quería un concepto que estuviera a la altura de la música”, dice. “Pensé automáticamente en Alfonsina, pero al releer algunas cosas me di cuenta de que en realidad la conocía muy poco. Me parecía tan feminista, tan revolucionaria, que me puse a investigar su vida para ponerle contexto a su poesía y se convirtió en una pequeña obsesión”. De los versos de Storni nacen estas historias de mujeres cambiantes, de lugares oscuros y luminosos al mismo tiempo, y de momentos que desnudan la naturaleza del amor y el deseo con afilado instinto lírico. Aquí, Cazzu nos lleva por el mundo encantado y crepuscular de Una Niña Inútil canción a canción. Dulce Tortura “Es una especie de droga que te induce a este pequeño mundo de 23 minutos que intentamos crear. Cumple la función de un intro, pero es una canción. Me parecía que el primer tema del disco tenía que ser una especie de hipnótico para que la gente no quisiera irse. Justo me enviaron un beat que me pareció increíble y yo traté de hacer una especie de brujería auditiva”. Romance de la Venganza “Nace de una frase que he escuchado decir a muchas personas, a muchas mujeres y a algunos amigos también. Recuerdo ser chica y escuchar a amigas de mi mamá decir ‘si yo fuese una hija de puta, si yo fuese mala, seguro que ahí los tendría comiendo de mi mano’. Y me pareció siempre algo muy loco, porque yo trataba de alguna forma de entender ese comportamiento. No sé qué es lo que tiene la gente mala que te envuelve. Siempre que pensé que era un pensamiento muy equivocado, pero después cuando me daba la vuelta y veía las cosas que pasaban en la vida se parecían mucho. A todos se nos ha pasado por la mente ‘si yo fuese más malo…’. A menos que ya seas malo, claro. Me parecía interesante en este proyecto, que toca emociones muy viscerales, y no necesariamente las que queremos tener, agarrar esa frase típica que todo el mundo ha sentido y hacer una canción a partir de ella”. Miedo “Empezó siendo una composición de Choclock [productor y cantante canario], que no sólo es uno de mis compañeros de construcción de este disco, sino también un gran artista, y después yo terminé de componer la segunda estrofa. En un disco sensual y erótico, esta es la canción más meramente sexual. A mí me gusta crear escenas y creo que esta es una canción muy escenográfica, representa un momento y un lugar que cada uno va a recrear como quiera al escucharla, que es lo más interesante. Es una invitación a construir en la imaginación. Se llama ‘Miedo’ porque es un enamoramiento un poco posesivo. Estas canciones están inspiradas en emociones que uno no puede controlar. Me parecía interesante que, entre tanto amor y tanto deseo físico, quedase claro que se podía convertir en algo posesivo. El poema de Alfonsina Storni habla de una mujer que tiene mucho miedo de vivir sin él”. Canción de la Mujer Astuta “Es un título increíble. Funciona como una especie de intro, como una pausita entre tanta letra y tanta escena. Es algo que pasó más de repente, en un momento en el que perdiste la consciencia de las cosas que estaban sucediendo. También tiene una pequeña magia auditiva que es que yo le pedí a un amigo, un artista conocido dentro del género, que tira unas voces que yo creo que hay gente que va a notar. Prefiero que lo descubran por sí mismos”. Conversación “Es una de mis favoritas. Habla de una relación tóxica en la que hay una parte que es la que somete y la otra que es la sometida y se rebela. Tiene que ver también con algo bastante sexual, pero con nociones que perturban. La hice con Chita, que es una niña que canta increíble, porque queríamos contar la historia juntas”. Capricho “Es una canción que es bastante especial para mí porque yo quería poner en palabras y sin miedo el sentimiento de una persona traicionada, el verdadero sentimiento dentro de esa oscuridad del enojo. Sacar sin vergüenza un sentimiento verdadero del que es muy difícil que alguien hable. Una se suele guardar esas cosas, cuando piensas ‘ahora se va a enterar…’. Y por más que al final no hagas nada, porque te da un golpe de madurez y lo piensas mejor, siempre existe ese lugar oscuro que nos provoca mucha bronca y mucha vergüenza y que es muy probable que derive en venganza”. Queja “Viene de un poema muy corto de Alfonsina. Como el resto de las canciones, ya estaba hecha antes de elegir los poemas. Habla de dos personas que viven un poco a ritmo de rockstar, parece como si fuéramos nosotros mismos, de sus encuentros y desencuentros. Es un poco adolescente, pero al mismo tiempo ellos aceptan que todo lo que les pasa es contradictorio. Es un revoltijo de emociones. El poema dice ‘Pero no puedo amar/Persigo lo perfecto/En mí y en los demás’. Me pareció superinteresante y es más o menos lo que expresa la canción. Termina con una especie de outro que es una despedida y una vuelta al mundo lento y tranquilo de disco después de un ritmo un poco más tropical”.